Karen Robles
Estratega en Desarrollo de Liderazgo & Talento | Diseño culturas resilientes que potencian personas y resultados | Transformación cultural con visión humana.
¿Sabes cuál es la forma más rápida de perder a tu mejor talento? Ignorarlo.
Y es real. He visto organizaciones que reconocen a sus High Potentials en presentaciones, pero no en acciones. Lo que al inicio genera motivación, acaba en una carta de renuncia.
Por lo general, se espera que esa persona brille sola, que la motivación y el desempeño sean suficientes para sostener el futuro de la compañía. Sin embargo, lo que ocurre es exactamente lo contrario, el talento se desgasta, la energía se apaga y, finalmente, alguien más lo aprovecha.
Hace poco acompañé a una empresa que estaba viviendo este dilema. Tenían a tres líderes jóvenes con un potencial enorme, pero sin un plan claro de desarrollo. Estaban motivados, pero también frustrados porque sentían que todo dependía de ellos, sin respaldo ni guía. La organización tardó en reaccionar, y para cuando quisieron acelerar su crecimiento, uno de ellos ya había aceptado una propuesta en otra compañía. Ese fue el punto de inflexión.
No invertir en tu talento más prometedor no solo significa perder a una persona valiosa, sino perder años de conocimiento, relaciones construidas, visión fresca y, sobre todo, confianza en la capacidad de la organización para cumplir lo que promete. Esto es lo que realmente está en juego.
A lo largo de los años que vengo liderando el área de Leadership & Development, me queda más que claro que los High Potentials (HiPo) no esperan únicamente ascensos rápidos o beneficios económicos. Esperan proyectos retadores, feedback constante, visibilidad y, sobre todo, líderes que crean en ellos. Cuando esto falta, lo que se desperdicia no es solo talento, sino la posibilidad de acelerar la transformación cultural y estratégica de la organización.
En este tiempo, también he confirmado tres verdades incómodas que se repiten en cada proceso con talento de alto potencial.
La primera es que el talento se queda donde se siente valorado. No basta con un reconocimiento simbólico; lo que realmente marca la diferencia son las acciones concretas que muestran una apuesta real por su desarrollo.
La segunda, que el desarrollo acelerado es una necesidad. Los mercados cambian más rápido de lo que pensamos y, si no formamos líderes preparados para esos retos, la organización simplemente no podrá sostenerse en el tiempo.
Y la tercera, quizá la más dura es que el costo de reemplazar a un HiPo siempre es más alto que invertir en él, porque no se pierde solo a la persona, también se reinicia la curva de aprendizaje, se rompe la cultura y se erosiona la confianza del equipo.
Si hay algo que quiero que te lleves de este artículo es que cuando no inviertes en tu talento más prometedor, alguien más lo hará … y pocas pérdidas cuestan tanto como esa.
En Accelerate DEI|TALENT sabemos que desarrollar a los High Potentials es una estrategia clave, por eso nuestras soluciones de liderazgo están diseñadas justamente para acelerar su crecimiento, fidelizarlos y convertir su potencial en resultados reales para la organización.
RECUERDA que el reto de los líderes hoy no es solo identificar a los mejores, sino crear las condiciones para que quieran quedarse, crecer y transformar desde dentro.